Las trufas son hongos subterráneos que crecen en zonas muy determinadas. Concretamente, la variante conocida como Tuber melanosporum Vitt (la trufa negra) es muy apreciada en el mundo de la gastronomía y muy buscada por su increíble sabor, aroma y textura.
Esto sucede en todo el mundo, pues chefs de ámbito internacional desean aderezar sus platos con este hongo rugoso de color oscuro que suele esconderse de bajo de la tierra. Pero, ¿en España hay trufas negras?, ¿dónde se pueden encontrar en nuestro país?
Si tienes curiosidad por este delicioso manjar de la naturaleza o tú también quieres adquirirlo para tu despensa, ¡sigue leyendo! En este artículo te explicamos dónde puedes hacerte con ellas, en qué zonas crecen y todo lo que necesitas saber.
Las trufas en España, ¿es posible encontrarlas?
Las trufas pueden crecer en España, aunque rara vez lo van a hacer de una forma completamente natural. En la actualidad, prácticamente el 100% de las que se encuentran en nuestro país son cultivadas. Esto significa que los expertos crean los medios propicios para su desarrollo, pero no quiere decir que sean de peor calidad que las demás.
Hay algunas zonas en las que el cultivo es más habitual en nuestro país, en áreas que se encuentran en Zaragoza, Navarra, Teruel, Cuenca, Guadalajara, Cataluña, Logroño, Soria y Valencia. Sin embargo, la principal productora y la que podemos denominar como la capital de la trufa negra es Sarrión, perteneciente a la comarca de Gúdar-Javalambre.
Su recolección es muy complicada de una forma natural, porque crecen bajo la tierra y porque prácticamente todas son cultivadas por los especialistas en las zonas mencionadas. No obstante, en Trufalia se pueden adquirir las deseadas Tuber melanosporum Vitt.
Las zonas en las que crecen las trufas
Las trufas tienden a crecer junto a las carrascas o las encinas, aunque ocasionalmente son capaces de proliferar en entornos cercanos a otras especies como los avellanos, los pinos, castaños o nogales. Si es hábitat es propicia, hay áreas en las que pueden desenvolverse de una forma próspera.
Sin embargo, son bastante difíciles de divisar o de encontrar de un modo casual, ya que se van a desarrollar fundamentalmente debajo de la tierra. Habitualmente, se emplean a perros que son entrenados para ellos para que las localicen mediante su olor y las señalen a los profesionales que se dedican a recolectarlas.
Hemos visto dónde crecen en España, pero en otros países del extranjero también se pueden dar de forma natural. Es en entornos muy similares a los que mencionamos y también se esconderán debajo de la tierra.
Sarrión: la capital de la trufa negra
Sarrión se lleva la palma en nuestro país, pues se trata del mayor productor de este manjar. Este pueblo de Teruel tiene las condiciones perfectas para el desarrollo de los hongos, pues se encuentra a 1000 metros por encima del nivel del mar y ofrece un clima seco. La tierra es muy caliza, el sol siempre acompaña y la trufa encuentra árboles perfectos para vivir. Tal es su importancia que la Asociación de Truficultores de la zona organiza una feria anual para exponer la extensión de sus producciones.
¿En qué terrenos se buscan las trufas?
Las trufas no solo necesitan encontrar los árboles apropiados y una buena tierra para cubrirse. También son bastante exquisitas a la hora de decidir las condiciones del terreno en el que van a prosperar, por eso mismo son tan complicadas de encontrar y tan deseadas en todo el mundo.
Sus favoritos son los lugares que están abiertos y soleados, aunque algo borrascosos. En ellos ha de haber árboles truferos de las especies que mencionamos anteriormente, aunque estos deben crecer a 600 o 1000 metros de altura.
Curiosamente, es bastante probable que crezcan en sitios en los que ha habido previamente carboneras antiguas, en las que se apilaba la leña y esta se cubría de arcilla, con la principal misión de obtener una suerte de carbón vegetal. El motivo es que todo este procedimiento modifica el pH de la tierra y lo hace más enriquecido con materia orgánica. Ideal para su desarrollo.
¿Para qué se usa la trufa negra?
La trufa negra es un manjar que puedes emplear para hacer deliciosas recetas, así que contar con alguna de ellas en tu despensa dará mucho juego a tu cocina. De hecho, tendrás uno de los alimentos más exclusivos y deseados.
Lo mejor es que ofrece una gran versatilidad en su consumo. Se puede tomar fresca, sin cocinar, algo que se hace comúnmente rallando el ejemplar, haciendo finas láminas o en tacos diminutos.
¿Con qué otros alimentos combina mejor? En este sentido, también encaja con todos los gustos. Funciona a la perfección con pescados y mariscos, con aves o carnes blancas, también combinada en ensaladas o haciendo platos de pasta. Sin embargo, el mejor aliado con el que se puede topar es con el huevo, con este ingrediente se elaboran las recetas más deliciosas y sofisticadas.
Lo importante es comprarla con todas las garantías y conservarla bien, pues hemos visto que salir a buscarla es prácticamente misión imposible. Para ello debes saber que su temporada es desde mediados del mes de noviembre hasta mediados de marzo. A partir de ahí, puedes encontrarla fresca y muy buena.
Guardar y conservar las trufas
Las trufas negras necesitan buenas condiciones para conservar sus propiedades y llegar intactas al momento de su consumo, ¡no querrás desperdiciarlas! Para ello aconsejan ponerlas al vacío en un envoltorio de plástico y cubrirlas con papel de cocina para que actúe como absorbente de la humedad. Después, esto hay que meterlo en un recipiente que sea de cristal.